II Subida (y bajada) al Castillo de Santa Bárbara

Este pasado domingo se celebró la segunda edición de una carrera que me parece preciosa y que ojalá se convierta en una mítica de la provincia alicantina, la II Subida al Castillo de Santa Bárbara, aunque este año, a diferencia del anterior, incluía la bajada por la Ereta lo que añadía un plus de dureza, ya que menuda bajadita...

Antes de empezar a contar la historia, quisiera reconocer el esfuerzo, las ganas e ilusión que pone el Grupo Brotons en este tipo de eventos. Ha sido una carrera no sólo gratuita, sino solidaria y ecológica (ya que no había ni motos ni coches, sino que la carrera era guiada por bicicletas), que ha conseguido reunir a más de 1.800 corredores alicantinos, lo que supone mayor participación que muchas carreras de renombre. Se dejan la piel en cada carrera y eso es de agradecer.

Bueno a lo que vamos. Mis expectativas en esta carrera se centraban en intentar subir al podio, aunque está claro que vayas donde vayas siempre hay alguien bueno o muy bueno (dígase Micó), pero por intentarlo que no quedara. Así que visto que este año incluía una bajada "peligrosa", el sábado fui a inspeccionarla con mi hermano aprovechando el rodaje que estábamos haciendo. Primera conclusión, alguien se va a matar si no soy yo... segunda conclusión, si vas mareado por dejarte las fuerzas en la subida, te despeñas.



Salida de la carrera (Fuente: Berná Pablo)


Al día siguiente llego junto a mi hermano Davitxu a la salida en el Ayuntamiento donde me encuentro con los compañeros del Running Team, entre ellos Carlos Marquina, Juanjo Martínez, Jorge Castella y Alan Martínez, y al otro lado de la barrera a Javi Pradillos que no está pasando por una buena racha debido a unas inoportunas lesiones, pero que pronto volverá a dar guerra. Después de un intenso calentamiento, nos situamos en la estrecha salida y pocos minutos pasadas las 11 dan la salida. Como es de esperar Micó sale como una bala con mi hermano siguiéndole el rastro y como no, el gran Kiko. Intento seguirles pero el ritmo por debajo de 3'/km me mata, así que me descuelgo hasta que pronto me pasa Isaac López. Me sorprende verle sobretodo porque no le había visto calentar, ni en la salida así que pronto veo como mis opciones de podio desaparecen.

Aquí podéis ver los grupos tras el primer km. A Micó ni se le ve, después
Davitxu con Isaac, y tras ellos mi grupo con Marquina, Juanjo, un chico
del Piero Magli y Jorge a punto de enganchar

En cualquier caso no tiro la toalla y sigo a mi ritmo junto a Marquina, Juanjo y un chico del Piero Magli. Justo antes de comenzar la subida enganchamos con mi hermano e Isaac con Micó a lo lejos, pero voy forzado y está claro que en esas condiciones una rampa del 20% te bloquea las piernas. En pocos metros el grupo de mi hermano me saca un mundo y me doy cuenta de que la cosa no va bien... me duelen las piernas, no llevo ritmo de brazos y ver que el grupo se va te deja k.o. psicológicamente. Arriba veo que mi hermano se ha despegado ligeramente del grupo, y yo voy a unos 20 segundos de Marquina, Juanjo e Isaac. Faltando únicamente 2 kms para meta y siendo de bajada, esa distancia es insalvable, además no vale la pena jugársela por intentar mejorar un puesto cuando voy 6º; otra cosa sería si me jugara la carrera. Le pongo un poco de cabeza a la bajada y a pesar de que aprieto a muerte en las rectas, en las curvas, escalones y zonas de tierra decido levantar un poco el pie ya que no soy demasiado hábil. Al final, termino en una meritoria 6ª posición difícilmente mejorable.

Grupo de Davitxu, Marquina, Juanjo e Isaac (Fuente: Marivi-Angelín)

A unos 15 segundos les sigo en
solitario (Fuente: la artista de
mi madre)

Balance final: Micó gana (como era de esperar), 2º mi hermano, 3º Isaac, 4º Juanjo, 5º Marquina, 6º el que suscribe, 8º Jorge, 14º Alan, es decir, todos los integrantes del Running Team entre los 20 primeros, con 5 de ellos entre los 8 mejores. Vaya equipazo! Sólo os digo que copamos todos los podios de la carrera.

Esto es lo que yo llamo "cara de velocidad". También
podéis apreciar la tremenda subida



 En mi caso, estoy contento con mi sexto puesto aunque me he vuelto a dar cuenta que lo mío no es subir. Ya me di cuenta en Fuencarral y ahora me he vuelto a acordar que esto no es como la bici. Me van mucho mejor las carreras llanas, pero no puedo negar que carreras como ésta me encantan, así que no descarto empezar a entrenar un poco más la subida.

Llegada a meta en el Ayuntamiento (Fuente: Berná Pablo)

Podio de locales. 1º Davitxu, 2º Marquina, 3º yo, 4º Jorge

Este domingo que viene correré la Media Maratón de Madrid donde intentaré mejorar mi marca actual en la distancia (1:14:00)... es lo que tiene que tu hermano te pique. No sé si lo conseguiré teniendo en cuenta el perfil de la prueba, pero no puedo evitar correr las carreras sin un objetivo claro. Muchos de vosotros no estaréis de acuerdo y me diréis que a las carreras hay que ir a disfrutar... para mi disfrutar supone superarme, y por ello me impongo objetivos a corto plazo. A veces salen, a veces no, sin embargo para mi correr sin un objetivo, sin un reloj en mi muñeca, me cuesta muchísimo.